Economía
CAMBIO SUSTANCIAL
En una entrevista exclusiva, David Miazzo, economista jefe de FADA, comparte su análisis detallado sobre cómo las propuestas de Milei podrían influir en la economía argentina, destacando el papel crucial del sector agropecuario en la recuperación.
¿Cómo ven en FADA la evolución de Javier Milei antes y después de las elecciones?
Hay dos factores clave que influyen en nuestra percepción. En primer lugar, la alianza con Bullrich y Macri disminuyó el riesgo de gobernabilidad, que era una preocupación inicial. La pregunta era: ¿Cómo va a ser para gobernar sin territorio, sin diputados, sin senadores? Tener ese apoyo le amplía esa base de gobernabilidad, lo cual tampoco es ninguna garantía, pero disminuye ese riesgo. Y se lo mira con mayor confianza. En segundo hecho político tiene que ver con la notoriedad adquirida por Milei, junto con sus propuestas y expresión clara de un sentimiento popular sumaban su excentricidad sus exabruptos, que también hacían dudar. Desde las PASO, hemos observado una disminución en su estilo eufórico, mostrándose más concentrado y explicando las cosas con claridad en las entrevistas posteriores a la victoria electoral. Así contrarrestó la incertidumbre inicial sobre su capacidad para gobernar.
¿Cuáles son, desde la perspectiva de FADA, los principales desafíos económicos que enfrenta Milei después de las elecciones?
Los desafíos principales son de índole macroeconómica. La herencia dejada presenta un profundo desequilibrio fiscal, monetario (reflejado en las LELIQs) y cambiario, con reservas internacionales negativas, deuda por importaciones y una brecha cambiaria del 170%. Esta situación se complica por un contexto social complejo, con más del 40% de pobreza y una pérdida significativa del poder adquisitivo en los últimos 5 años. La tarea será desafiante, ya que se requerirá realizar ajustes fiscales, monetarios y cambiarios, lo cual puede llevar rápidamente a la inflación, afectando directamente el poder adquisitivo y aumentando la pobreza. El desafío adicional radica en lograr un equipo económico que genere confianza, implementar medidas con éxito y contener las tensiones sociales, la calle, considerando la resistencia de algunos sectores que ya han manifestado su disposición a resistir y combatir las medidas propuestas.
¿Cómo visualiza la situación económica, especialmente en términos cambiarios, inflacionarios y políticos, en los primeros meses de la gestión de Milei?
Prevemos un verano muy caliente en términos cambiarios, inflacionarios y de movimientos políticos y sociales. Milei ha anticipado que será un shock y no un proceso gradual, no porque quiera sino porque la realidad es que no tiene alternativa, ya que carece de recursos para financiar un enfoque más gradual. Incluso para cumplir con compromisos inmediatos como el pago de aguinaldos o importaciones, no hay un dólar. No hay otro mecanismo de financiar un proceso de estabilización que no sea de shock.
¿Cómo afecta la expectativa de cambio profundo generada por Milei a corto plazo?
Ha creado una presión adicional. Massa representaba la continuidad, pero Milei ahora simboliza un cambio radical. Existe una expectativa de que implementará cambios significativos de manera rápida, lo que agrega un elemento de urgencia a sus acciones.
¿Cómo influye la resistencia esperada por parte de diversos sectores en la rapidez de las decisiones de Milei?
Probablemente el 99% de la medida que tome van a ser resistidas, o por el sector público o por la política o por los sindicatos o por los movimientos sociales o por todo al mismo tiempo. Esta oposición no dejará mucho margen de maniobra, lo que exigirá a Milei actuar con celeridad para mostrar resultados con rapidez y evitar que la resistencia se vuelva insostenible. Mientras que por ejemplo un Massa iba a tener mayor capacidad de maniobra, más tiempo para acomodar las cosas porque iba a tener de alguna manera cierta paciencia desde algunos sectores que en este caso ya están listos para combatir.
¿Cuál ha sido la reacción del mercado hasta ahora y cómo afecta a los objetivos económicos de Milei?
Hasta ahora, la reacción del mercado ha sido interpretada como un voto de confianza. Las acciones y bonos subieron, y el dólar no se disparó, lo que sugiere que se ve más como una esperanza de mejora que como una posibilidad de caos económico y político.
Como dijo él muy claramente estos días: respetará las deudas y los contratos a rajatabla, tratando de despejar dudas sobre reestructuración de la deuda, plan bónex, etcétera. Pero para despejar el horizonte de ese tipo de medidas, además de decirlo, tiene que conseguir entre 20 y 30 mil millones de dólares de piso, si no lo consigue no hay mucho camino en medio que permita estabilizar esta situación.
¿Cómo podría Argentina obtener los 35 mil millones de dólares necesarios para afrontar la situación económica actual?
La posibilidad de obtener fondos frescos presenta desafíos considerables. Aunque los argentinos tengan dólares guardados, no parece ser una solución suficiente, y el Fondo Monetario Internacional (FMI) tampoco porque ya tiene una gran exposición en la Argentina, no creo que quieran seguir sumando mayor exposición Las opciones de blanqueo de dinero o esquemas similares podrían no ser efectivas en este contexto.
¿Qué otras alternativas existen para obtener esos fondos, especialmente teniendo en cuenta la resistencia del FMI y que ya Milei expresó que con China no puede negociar?
El respaldo financiero de China parece improbable, y el FMI ya tiene una gran exposición en Argentina. Queda como única opción viable la búsqueda de financiamiento a través de acreedores privados, ya sean bancos internacionales o fondos que de alguna manera confíen en el proceso.
¿Existen ejemplos de otros países que hayan logrado obtener financiamiento en situaciones similares?
Hay algunos casos más emblemáticos, como Irlanda, pero estando dentro de la Unión Europea, que es un cantar muy distinto al nuestro. Pero es algo factible, si se lo mira con la perspectiva del PBI de Argentina, de las exportaciones. Tampoco es tanta plata 30 mil millones de dólares. El tema es que en la situación en la que estamos es a todo o nada.
¿Se puede bajar un 5% del PBI haciendo ajuste fiscal como propone en su plataforma?
Una reducción del 5% del PBI parece más factible. La implementación de medidas para reducir el gasto en un 15% requeriría cambios estructurales.
¿Cómo ven a Milei los gobiernos a nivel internacional, especialmente en términos de su orientación hacia el libre mercado?
La percepción de Milei a nivel internacional está experimentando un cambio. Su orientación hacia el libre mercado y su disposición a realizar reformas estructurales necesarias para el crecimiento económico han generado respuestas positivas en los medios internacionales, lo que podría influir positivamente en su capacidad para obtener financiamiento.
¿Cómo planifica FADA encarar la situación económica desde el 10 de diciembre en adelante?
En este momento, estamos trabajando en dos fases. La primera, durante el verano, se centra en acercar propuestas ya elaboradas al equipo del presidente electo. Hemos presentado iniciativas como la eliminación de derechos de exportación, y ya hemos tenido reuniones con equipos de Milei. La interacción con las nuevas autoridades busca impulsar la implementación de propuestas que ya están sobre la mesa, como los lineamientos estratégicos de la cadena bovina. La segunda fase, que se planteará a partir de marzo, dependerá de cómo evolucione la situación durante el verano y se irá definiendo en función de los cambios que se observen.
¿Cómo ve FADA la perspectiva para provincias como Salta en el contexto de las propuestas de Milei?
Si logra estabilizar la economía y reducir la inflación, especialmente sacando retenciones y con un tipo de cambio único, las provincias productivas con fuerte presencia agropecuaria serán las más beneficiadas. Provincias como Salta, con su enfoque en el agro, minería y energía, podrían experimentar un crecimiento significativo. La idea es que estas políticas impulsen a las provincias más productivas y generen un desarrollo sostenible.
¿Cómo anticipa FADA que se desarrollará la reactivación económica a nivel nacional y provincial?
En la fase inicial, se espera una reactivación más rápida en las provincias productivas. Para dar un ejemplo, lugares como Río Cuarto de donde soy yo, y todo el interior productivo podrían ser de los primeros en experimentar la recuperación económica, mientras que áreas más orientadas al consumo y servicios, como el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), pueden tardar más en reaccionar. La contención social será crucial en estas áreas, ya que la reactivación puede llevar tiempo en llegar. Se visualiza un proceso de 6 a 12 meses caóticos antes de que se vean resultados concretos.
¿Cómo ve FADA el papel del agro en este proceso y cuáles son las perspectivas para el sector?
Si las políticas son exitosas, el agro tendrá un papel fundamental en el proceso de recuperación económica. Se estima que el agro puede crecer significativamente, con la posibilidad de aumentar la producción de granos en más del 50%, duplicar las exportaciones de carne vacuna y crecer en varios sectores agropecuarios. La capacidad de reacción del agro es importante, y la clave será convencer a Milei y su equipo de que las políticas positivas para el agro generarán rápidamente inversiones, mayor producción, exportación y empleo.
